Disney empieza a ver la necesidad de tener un control más directo en el sector de los videojuegos para lo cual ha cerrado un trato con Epic Games. Una de las compañías que más se han pegado el tortazo por el despiertismo ha adquirido una participación accionarial por valor de 1500 millones de dólares de la compañía de Tim Sweeney. El acuerdo incluye un calendario de proyectos para los próximos años que lanzarán conjuntamente.

La compañía pone el ojo en el motor Unreal, que será el que utilice para los nuevos proyectos que tienen en preparación para expandir el alcance de los subproductos que ha lanzado en los tiempos recientes de la propia Disney, Pixar, Marvel, Star Wars, Avatar y otros. A todo le van a poner un lacito para ver si los jóvenes digieren mejor la agenda política de la compañía.

De entrada el infame director ejecutivo de Disney, que por alguna razón volvió a ser Bob Iger para solucionar el desastre que él mismo había creado, pone la mirada inicial en Fortnite, un juego que se llenará de todo lo de Disney y sus filiales. No es nada nuevo porque ambas empresas ya han tenido colaboraciones anteriormente. Pero ahora habrá mucho más contenido Disney, de Marvel y demás.

Sobre el futuro de los videojuegos, promete invertir fuerte en el sector a través del motor Unreal. Curiosamente se apunta el tanto de los éxitos de ventas Spider-Man y Spider-Man 2 cuando estaba obligada a licenciar los derechos. No menciona que también ha licenciado desastres como Marvel's Avengers en el que metió mucha más mano, pero me imagino que será parte de la decisión de tener un mayor control de los videojuegos. Pero el problema real es el motor Unreal, ya que Disney podría vetar el acceso a él a su competencia en el sector audiovisual. El acuerdo está sujeto a aprobación regulatoria.

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Vía: Ars Technica.