Durante la conferencia de presentación de la WWDC de la semana pasada de Apple, la compañía prestó atención a la fragmentación de Android e iOS. Para maquillar la fragmentación, Google cambió hace un par de meses la forma de contabilizarla para basarse en usuarios que acceden a Google Play, y aun así sigue siendo bastante poco atractiva para los desarrolladores.
Apple ha decidido establecer también una gráfica circular con la misma información que proporciona Google en el mismo espacio de tiempo: los últimos 14 días del mes, basados en los accesos a la App Store. Esa gráfica muestra que el 93 por ciento de los usuarios cuenta con iOS 6 instalado, un 6% iOS 5, y el 1 por ciento restante disponen de otras versiones. Google ignora millones de dispositivos Kindle Fire (que usan Amazon Appstore) y de dispositivos chinos Android.
La crítica principal de los usuarios de Android es que Apple elimina ciertas características de iOS para que se pueda instalar en (casi) cualquier dispositivo de los últimos tres años (mucho más de lo que muchas compañías dan soporte a Android, ya que en muchas ocasiones no actualizan la versión de Android después de poner a la venta el terminal). Pero se olvidan que la actualización a una versión superior de iOS (y especificamente la 7) proporciona:
- Mejoras de seguridad.
- Mejoras en las aplicaciones nativas.
- Acceso a una mayor variedad de APIs (1.500 nuevas), y para ello hay que modificar el núcleo del sistema operativo.
- Eso incluye mejoras en el servicio de iCloud, realmente imprescindibles, que requiere la actualización a iOS 7.
- La nueva interfaz gráfica.
- El acceso rápido a la activación de la WiFi, cambio de brillo, etc.
- Multitarea.
En el caso de iOS 7, si los usuarios de iOS 6 no se actualizan se van a perder cosas como la compatibilidad para mandos MFI (Made For iPhone, iPod, iPad) que es una de las mayores revoluciones de este WWDC al estandarizar el protocolo de mandos para juegos de iOS. Ahora mismo hay una gran cantidad de mandos para Android e iOS, pero no todos los juegos usan la misma forma de implementarlos, ni proporcionan compatibilidad. De esta forma, a partir de ahora cualquier mando de iOS valdrá para cualquier juego que implemente el protocolo de mandos de Apple.
Tampoco se podrían usar los juegos desarrollados con Sprite Kit, que proporciona a los desarrolladores un framework potente para crear juegos en 2D, con física, explosiones y humo del que no se tienen que preocupar por implementar ellos mismo.
Sí, quizás se pierdan en el camino ciertas características (AirDrop solo está disponible para iPhone 5S, y los filtros solo se pueden realizar a las fotos del carrete en el iPhone 4S y anteriores, no a las que se van a tomar en el momento), pero de verdad que la fragmentación en un sistema operativo nunca es buena.