La semana pasada presentaba Motorola su nuevo teléfono de gama media Moto G. Se trata de un terminal con diseño similar al Moto X, pero que se va a poner a la venta en el mercado internacional y no solamente en EE.UU y Canadá. Aunque viene con Android 4.3 preinstalado, la actualización a Android 4.4 no tardará mucho en llegar.
Su principal característica es su precio: 179 dólares. En España ya se puede reservar por unos 175 euros (dependiendo del momento en que hagamos la reserva en Amazon), lo que le convierte en la mejor opción de compra con diferencia para todos aquellos que quieran cambiar de teléfono estas navidades y no quieran gastarse mucho. También se puede adquirir ya a través de Movistar para los impacientes, aunque en ese caso tendréis que pagar 203 euros.
El hardware que incluye cuenta con una característica fundamental: una pantalla de 4,5 pulgadas de alta calidad con una resolución de 1280x720 píxels. Lo habitual en ese rango de precio es encontrarnos con pantallas de calidad de colores mala o pasable, de menor resolución y tamaño. Pero en el Moto G Motorola ha querido ofrecer una pantalla de buena calidad. El resto del hardware es lo de menos ya que está en la línea de la gama media-baja: 1GB de RAM y un procesador de cuatro núcleos a 1.2 GHz, 8GB de almacenamiento interno (sin tarjeta microSD, un gran punto en contra) y cámara de 5 megapíxels.
Aquellos que quieran disponer de más espacio en el teléfono van a tener que optar por otras opciones de compra en esta gama, pero los que no usamos el teléfono para jugar o ver películas es una opción ideal por calidad/precio. Compra recomendada, con buen futuro de rendimiento cuando llegue Android 4.4 y posteriores junto a ART, la nueva versión del entorno de ejecución de aplicaciones de Android.