Desde mediados de 2012, la compañía taiwanesa HTC no está teniendo unos resultados trimestrales como para tirar cohetes. De hecho en dos de los trimestres entró en pérdidas (uno de ellos el primero de 2014), y entre medias rumores de abandonos del barco por parte de directivos e ingenieros.

Los resultados del segundo trimestre de este 2014 son más esperanzadores para la compañía ya que ha obtenido los primeros beneficios reseñables en un año. La cantidad no es elevada, 75 millones de dólares, pero los ingresos de la compañía ascienden a 2.170 millones de dólares impulsados por el lanzamiento del nuevo HTC One (M8), su buque insignia con Android alabado por la crítica por su diseño en aluminio y buen rendimiento (y no tanto por su cámara).

La hora de la verdad llegará en el tercer y cuarto trimestre del año en el que HTC ya no tendrá un terminal tan novedoso y las ventas disminuyan. Teniendo en cuenta que HTC está en proceso de recorte de gastos (ha cerrado recientemente sus negocios en Sudamérica), posiblemente tenga resultados positivos.

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Vía: The Verge.