China lleva tiempo intentando eliminar del país la dependencia de las empresas extranjeras y, sobre todo, estadounidenses. Cuando no le gusta algo de lo que están haciendo, lanza a los medios de comunicación públicos a atacar a compañías como Microsoft, Google o Apple, y en muchos casos con buenos resultados.
Los planes del partido único de China de eliminar la dependencia que tiene el país de sistemas operativos estadounidenses, léase Windows y Android, podrían fructificar este octubre si todo marcha según lo planeado en uno nuevo creado por el Ministerio de Industria chino. Aparecerá primeramente para equipos de sobremesa y posteriormente dará el salto a lo que realmente les importa: los dispositivos móviles.
El nuevo sistema operativo contará con su propia tienda de aplicaciones. El ministro de industria cree que este sistema operativo podría sustituir la dependencia de las versiones extranjeras en uno o dos años en cuanto a los PCs, y en tres a cinco años en el caso de los dispositivos móviles como smartphones y tabletas.
Linux es el sistema operativo más utilizado en la actualidad en el mundo gracias a una distribución, Android, que está instalada en los más de 1.000 millones de dispositivos que se venden cada año. Mucho más que PCs portátiles y de sobremesa con Windows, y muchos más que dispositivos con iOS que se sitúan en torno a los 250 millones anuales.
El gobierno chino prohibió en mayo el uso de Windows 8 en las computadoras gubernamentales, y al menos la mitad de los PCs de China continúan utilizando Windows XP al que Microsoft retiró el soporte hace unos meses.
Vía: Phone Arena.