Actualmente hay muchos usuarios interesados en encriptar sus datos personales en todos aquellos dispositivos que utiliza a diario. Aunque se puede dejar esta tarea al sistema operativo y realizar la encriptación por software, la mejor forma de hacerlo es que el dispositivo de almacenamiento lo pueda hacer por hardware siendo compatible con algún estándar de encriptación actual para así no penalizar su velocidad de lectura y escritura.
Por curiosidades de la vida (o quizás no tantas), Toshiba y Kingston han presentado nuevas memorias USB con esta característica, más habitual en discos SSD.
Kingston DataTraveler 4000 G2 cuenta con certificado FIPS 140-2 de nivel 3 del gobierno estadounidense, lo que además de requerir autenticación para desencriptar la información también contiene protecciones contra la manipulación física. Utiliza cifrado AES de 256 bits, es USB 3.0 y tiene un tamaño de 77.9mm x 22mm x 12.05mm. Alcanza velocidades de lectura de hasta 250 MB/s y de escritura de 85 MB/s en su modelo de 64 GB. Es capaz de bloquearse y formatear su contenido por si solo tras 10 intentos no válidos de acceder a la información.
Toshiba Encrypted USB Flash Drive es un modelo que también tiene certificado FIPS 140-2 de nivel 3, incluye mismo cifrado AES de 256 bits por hardware y también se formatea por si solo tras 10 intentos de intrusión. Llega con capacidades de 4, 8, 16 y 32 GB, y su precio irá desde los 95 $ por la versión de menor capacidad hatsa los 200 $ de la versión de 32 GB. La diferencia está en que posee un teclado físico para realizar el desbloqueo de la memoria USB para su lectura por cualquier equipo, e incluye una batería recargable que le permite bloquearse y encriptar el nuevo contenido en el momento en que se retira del PC.
Vía: TechPowerUp (1), TechPowerUp (2).