Sony finalmente ha anunciado una reestructuración que llevará en los próximos tres años para intentar convertir a la compañía en rentable. Las actuales divisiones de dispositivos (que no telefonía) y juegos son las que han evitado en varios trimestres consecutivos entrar en un círculo vicioso de pérdidas, y por eso de 2015 a 2017 la compañía se va a redoblar esfuerzos en ellas para volver a los beneficios en 2018.
Tampoco me sorprende este hecho puesto que, además de ser la consola de nueva generación más vendida, se mueve un gran volumen de juegos para PlayStation 4. Además que la lista de lanzamientos para 2015 es, literalmente, enorme. Como no todo es PlayStation, Sony también se va a centrar en música y cine para perfilar sus cuentas trimestrales.
En estos dos últimos apartados tenemos importantes movimiento, como la intervención de Marvel para crear las películas de Spiderman (son películas que ingresan cientos de millones, superan alguna los 1.000 M$), y la colaboración de Spotify para relanzar su servicio de streaming de música como PlayStation Music.
Estas divisiones contarán con la bendición de la matriz para hacer y deshacer a su gusto para que puedan adaptarse más rápidamente al mercado y que se puedan centrar en generar más beneficios. Muchas veces los intereses de Sony no son los mismos de Sony Music y esta decisión es una constatación (quizás tardía, pero a tiempo) de ello.
Fuente: Sony.