En los últimos meses Uber no ha recibido más que mala prensa. Aunque es un servicio que funciona bien, en Europa y otros países ha optado por establecerse de manera alegal o directamente ilegal, con conductores sin pagar licencias de transporte. Han llegado a sufrir registros en sus oficinas de Francia y Corea del Sur.
Para hacer frente a los diversos problemas que han estado surgiendo, junto con la violación de una pasajera en la India, la compañía ha creado un nuevo código de conducta (podéis verlo usando un proxy, que Uber sigue bloqueada en España). Es un documento que indica cómo deben tratar los conductores a sus pasajeros, la seguridad de los mismos, y las normativas legales a cumplir. Este apartado es cuanto menos curioso y bastante irónico.
La compañía va a crear un consejo asesor que se asegure de supervisar el cumplimiento del código de conducta, y habrá auditorías externas de que efectivamente se cumplen. Para terminar, la compañía ha creado equipos de respuesta rápida en caso de emergencias para dar asistencia inmediata a sus conductores o pasajeros.