Uno de los tipos más molestos de problemas en los navegadores es el de los inyectores de anuncios, que puede llegar a ser un caso especial de adware. En principio no parecen amenazar la seguridad de nuestros equipos, pero se dedican a mostrar anuncios sin parar en todas las páginas que visitamos.
Suelen ser el resultado de instalar software de páginas que no son las oficiales, la instalación de barras de enlaces, o algunas extensiones de los navegadores. Google estima que los inyectores de anuncios están presentes en el 5% de los usuarios que visitan las páginas web de la compañía, y afecta a todos los sistemas operativos y navegadores por igual. OS X, Windows, Chrome, Firefox, Internet Explorer...
Google ha llegado a calificar como malware el 34% de las extensiones que inyectan anuncios, bloqueándolas a través de las herramientas habituales integradas en Chrome y otros servicios suyos. Además han encontrado 192 extensiones fraudulentas de Chrome que afectan a 14 millones de usuarios y las han deshabilitado. Google cuenta ahora con nuevas técnicas para descubrir y bloquear automáticamente las extensiones peligrosas, ya sean nuevas o hayan sido actualizadas.
Vía: TechCruch.
