La compañía Pebble, responsable del reloj inteligente del mismo nombre, presentó recientemente una campaña en KickStarter para financiar el Pebble Time, teniendo un gran éxito con la recaudación de más de 20 millones de dólares. En su momento me pregunté por qué recurrían otra vez a KickStarter si en principio se estaba vendiendo bien y la compañía no marchaba mal. Quizás por publicidad.
La segunda premisa que hice puede que fuera equivocada. Según los últimos rumores, Pebble ha tenido que recurrir a un banco de Silicon Valley para pedir un préstamo de 5 millones de dólares y solicitar una línea de crédito de otros 5 M$. Si miramos a los gastos que tiene la compañía, eso incluye las nóminas de 150 empleados. Teniendo en cuenta lo que cobra actualmente un ingeniero en Silicon Valley, del orden de los 100.000 dólares anuales (y más), podría ser uno de los problemas más importantes.
Puesto que las cuentas de las compañías que no cotizan en bolsa no tienen carácter público, es difícil saber la situación exacta en la que está Pebble. El director ejecutivo de la compañía se ha negado a hacer declaraciones respecto a estos rumores. Aunque haya podido solicitar ese préstamo, podría ser necesario para afrontar la expansión de la compañía mientras ponen a la venta el Pebble Time.
Vía: TechCrunch.