El derecho al olvido se aprobó el año pasado por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, pero debido a un escaso marco de aplicación más allá de que los buscadores debían tener un mecanismo para la solicitud de eliminación de información de ciudadanos europeos, Google ha estado poniéndole la zancadilla a la medida.
Pero Francia se cansó del tira y afloja con Google, y le ordenó que aplicara el derecho al olvido a los resultados de búsqueda en todo el mundo, no sólo en los países de la Unión Europea. Ahora la apelación de Google ha sido rechazada por los tribunales franceses, y ahora la agencia de protección de datos francesa está en posición de obligar a que Google a que acate las leyes europeas y francesas como debe hacer cualquier empresa e individuo, o se enfrentará a fuertes multas.
El presidente de la Comisión Nacional de Informática y Libertades (CNIL) podrá empezar el procedimiento sancionador, que podría comenzar en los 300.000 euros, pero que según las leyes franceses podrían ascender hasta el 5% de los costes de operación globales de la compañía. En 2014 fueron de 50.000 millones de dólares, por lo que la multa podría ascender hasta los 2.500 millones de dólares.
Vía: Ars Technica.