Durante el lanzamiento de las tarjetas serie 300 de AMD, la compañía hizo una rápida descatalogación de toda la serie 200, incluida la R9 295X2. El motivo de AMD, al menos el que intuyo y no creo equivocarme, estaba la llegada de las R9 Fury con un precio similar al de la R9 295X2 pero con la mitad de la potencia. Malo para los negocios vender un producto nuevo peor que uno antiguo, pero al mismo precio.
Durante la pasada VRLA Winter Expo en la que AMD mostró su próxima R9 Fury X2 que llegará junto con las gafas de realidad virtual HTC Vive en los próximos meses, AMD dio detalles de esta tarjeta gráfica de doble GPU. Va a tener un rendimiento de 12 TFLOP, que es similar a los 11,5 TFLOP de la R9 295X2. Pero a cambio en lugar de consumir 500 W va a consumir 375 W, aunque no han indicado qué tipo refrigeración usará.
La potencia de cómputo no siempre se traduce en rendimiento en juegos, pero se puede hacer una extrapolación sin fallar demasiado. Ahora toca poner en contexto esos 12 TFLOP. La R9 290X tenía 5,7 TFLOP, y la 295X2 (dos GPU 290X) tenía unos 11,5 TFLOP, y en las pruebas de rendimiento esta última siempre ha tenido el doble de rendimiento que la primera, por lo que a priori también se puede deducir que la Fury X2 va a tener un rendimiento muy similar a la R9 295X2.
Ahora mirando a que se compone de dos chips Fiji, y que es un chip de poder alcanzar los 8,5 TFLOP, eso haría que si mantuviera el reloj debería alcanzar la Fury X2 los 17 TFLOP. Pero se va a quedar muy lejos, así que será una versión descafeinada, con frecuencias menores y menos potente. Exactamente un 30 % menos potente de lo esperado, y en un tamaño un poco mayor que la R9 Nano.
A cambio AMD dice que es igual de potente que la R9 295X2 pero con mejor rendimiento por vatio, descendiendo de los 500 W a los 375 W, que es la cantinela de la compañía para las próximas tarjetas gráficas Polaris, de las que dice poco de su rendimiento, solo que tienen "mejor rendimiento por vatio", y que es lo mismo que está vendiendo Nvidia para las Pascal. Veremos si la próxima generación de tarjetas no desilusiona.
Vía: WCCFTech.