Tras conseguir aterrizar por segunda vez el mismo cohete reutilizable, y anunciar la construcción de una base de lanzamientos en Florida, la compañía Blue Origin, propiedad de Jeff Bezos, ya está planeando su siguientes pasos. Sus planes para los próximos años acaban de ser revelados, en un evento celebrado en su cuartel general.
La compañía quiere comenzar los preparativos para enviar vuelos turísticos al espacio, construyendo para ello seis cohetes con capacidad para 6 pasajeros cada uno. Estos cohetes llegarían a 100 kilómetros de altura para que se pudiera experimentar unos minutos de ingravidez y contemplar el planeta como sólo los astronautas pueden hacerlo.
Las pruebas con pilotos comenzarán en 2017, con el objetivo de llevar pasajeros al espacio en 2018, a un precio que aún no han dado a conocer. Los tiempos podrían ajustarse en función de que cumplan o no los objetivos que se han marcado.
Vía: EnGadget.