Un error ortográfico cometido por un grupo de hackers ha echado por tierra su intento de hacerse con un botín de mil millones de dólares. A pesar de ello, han conseguido hacerse con 81 millones de dólares.
Este grupo se infiltró en los sistemas informáticos del Bagladesh Bank, haciéndose con las credenciales necesarias para hacer transferencias. Una vez obtenidas, bombardearon a la Reserva Federal de los Estados Unidos con solicitudes de transferencias a organizaciones de Indonesia y Filipinas.
Sin embargo, al escribir una palabra mal en una transferencia, escribiendo fandation en vez de foundation (fundación), la transferencia fue marcada como sospechosa, paralizándose las pendientes. La institución financiera de Bagladesh está investigando lo sucedido, habiendo culpabilizado a la Reserva Federal. Estos han respondido que han colaborado con la investigación y que sus sistemas no han sido comprometidos. Recuperar el dinero será casi imposible.
Vía: EnGadget.