Las pulseras de actividad se están volviendo bastante populares, empujadas por compañías como Apple y Google que intentan promocionar las bondades de sus relojes inteligentes. Pero en el fondo lo que necesita el deportista medio es un reloj que aporte información de actividad física precisa y concreta y que la batería dure días.
Garmin cuenta con una popular vívosmart HR, a la que la compañía ha renovado ligeramente llamándola vívosmart HR+, y ganando GPS en el proceso. Esto ha hecho que su precio suba de 150 euros a los 220 euros. Cuenta con el mismo sensor de ritmo cardíaco, acelerómetro, resistencia a agua hasta 5 ATM y capacidad realizar el seguimiento de actividades como andar, correr, ciclismo o natación.
Proporciona información sobre patrones de sueño, ejercicios realizados y comparaciones de distancias recorridas gracias a su GPS. Tiene una duración de hasta cinco días de uso con el sensor cardíaco activo, o hasta ocho horas seguidas de uso de GPS. Estará disponible en breve en púrpura, gris, azul y negro, y en dos tamaños para tipos de muñeca distintas.
Vía: The Verge.