Desde su lanzamiento el 4 de julio, Pokémon Go no deja de generar titulares. Ya sea por criminales ordinarios que tratan de atraer víctimas a ciberdelincuentes que crean un APK del juego con malware. No obstante, los riesgos de seguridad también provienen de la misma aplicación, la cuál da control total a la misma de la cuenta de Google del usuario.
Según se descubrió recientemente, la aplicación solicita permisos completos sobre la cuenta de Google del usuario en iOS, algo inusual para todo aquello que no sean aplicaciones de la propia compañía de Mountain View. Esto se puede comprobar accediendo a los ajustes de seguridad de la cuenta de Google y comprobando las aplicaciones conectadas a la cuenta. Si Pokémon Go está conectada, es posible eliminarla sin consecuencias aparentes para el juego.
La razón de que la aplicación solicite estos permisos podría haber estado encaminada a que Niantic recabase información sobre los usuarios, aunque la compañía ha indicado que se trata de un error inocente y que no han recopilado datos de los usuarios, solo la dirección de correo y su identificador de usuario. Tras darse cuenta de este problema, han comenzado a trabajar en una solución, aunque no han indicado cuándo estará disponible.