AMD lanzó el 4 de agosto su RX 470 de 4 GB a un precio de 179 dólares. Desde entonces le ha costado encontrar un hueco en los equipos de los jugones debido a una escasez de estas tarjetas y a que poco después Nvidia puso a la venta la GTX 1060 de 3 GB. La estrategia de lanzamiento de la compañía en lo referente a Polaris ha sido fallida, y lo demuestra sus resultados del tercer trimestre.
Para competir con la GTX 1050 Ti de 4 GB que tiene un precio de 139 dólares, AMD se va a ver obligada a bajar el precio de referencia de la RX 470 de 4 GB hasta los 169 dólares. En mi opinión es una mala idea, porque quien tenga un presupuesto ajustado, y es muchísima gente, va a seguir sin optar por la de AMD por ser más cara —quizás si sale de China la RX 470D la historia cambie—. También baja el precio de la RX 460 hasta los 99 dólares, pero es una bajada insuficiente para competir con la GTX 1050, a tenor de los comentarios previos sobre su rendimiento, que cuesta 109 dólares y se sitúa por encima del rendimiento de la GTX 950.
Los cambios de precio tardarán un tiempo en notarse en las tarjetas gráficas que están a la venta, ya que lo que hace realmente AMD es bajarles el precio del chip de la tarjeta gráfica a los ensambladores, y estos tienen que llevar esa bajada de precio a sus distintos modelos de tarjetas gráficas, una vez limpien un poco el inventario al coste anterior.
Bien es cierto que en diversos juegos la RX 460 se porta mejor que la GTX 950 como Deus Ex: Mankind Divided, pero otros que son DirectX 12 funcionan peor en la RX 460 que en la GTX 950 como Gears of War 4. Pero una bajada de 10 dólares me parece insuficiente si quiere que ese modelo sea comprado por aquellos con un presupuesto más limitado, aunque prefiero esperar a analizar las GTX 1050 y 1050 Ti para sacar conclusiones basadas en datos sobre si la bajada de precio de la RX 470, de tan solo 10 dólares, merece la pena.
Mientras tanto, todavía estoy esperando a la revolución roja, y la campaña de publicidad...
Fuente: Gamers Nexus.