MSI presenta una miríada de placas base con chipsets Z270, H270 y B250

MSI renueva sus placas base con los nuevos chipsets Z270, H270 y B250 de Intel, y lo hace con 24 modelos distintos, la compañía que más placas base ha presentado en el CES 2017. En su mayoría sustituyen a modelos equivalentes del mismo nombre con chipsets Z170, B150 y H170, con similares características pero con algunos cambios de diseño y características adicionales.

La novedad más importante es que los Kaby Lake aceptan memoria DDR4-2400 en todos los chipsets, por lo que para las placas más baratas tipo B250 habrá que mirar memoria de esta velocidad para aprovecharla al máximo. También son compatibles con Optane, la marca de almacenamiento de Intel que utiliza memoria 3D XPoint, de la que aseguran está a un paso en velocidad de la memoria RAM. De momento solo disponible en módulos de 8 y 16 GB para usarse como caché de un disco principal para aumentar su velocidad.

Placas básicas como la B250M Pro VH ahora cuentan con ranura para un SSD de tipo M.2 en formato 2280, aunque por lo demás no hay grandes novedades más allá del cambio de chipset en estos modelos básicos. Las cuator pistas PCIe adicionales permiten proporcionar toda la funcionalidad completa de puertos USB, y ese M.2 adicional de cuatro pistas PCIe 3.0 con protocolo NVMe.

MSI se ha centrado en los modelos más caros en añadir compatibilidad con el sistema de iluminación RGB personalizable Mystic Aura, así como añadir M.2 adicionales a costa de los poco usados en el entorno doméstico U.2, cabezales USB 3.1 Gen. 2 o Thunderbolt 3. También actualizan la BIOS para permitir mayores subidads de frecuencia a las memorias DDR4, y en algunos modelos también se añaden disipadores para los SSD de tipo M.2 —el calor es problemático en los modelos PCIe 3.0 x4, no en los SATA3—.

Podéis ver los detalles de todas las placas presentadas por MSI en la web de la compañía dedicado a ello.