El mercado de las placas mini-ITX se ha hecho un poco más grande con la presentación de la ROG Strix B250I Gaming. Es para jugones porque, bueno, lleva lucecitas de colores personalizables. En su tamaño de 17 x 17 cm incluye bastantes cosas para considerarlo un modelo avanzado.
Dispone de una sola ranura PCIe 3.0 y dos de memoria DDR4 de 2133 o 2400 MHz, así como dos M.2 compatibles con SSD de tipo PCIe. Incluye un chip wifi 802.11 ac MU-MIMO con Bluetooth 4.1, y las antenas se incluyen en la caja con un cable suficientemente largo para ubicarlo sin problemas en la mesa u otro lugar cercano.
En la parte posterior dispone de seis USB 3.0, un DisplayPort, un HDMI, y dos Ethernet, que utilizan un controlador I219V de Intel y un RTL8111H de Realtek. Incluye cabezales para una bomba de agua, otro para una tira de ledes RGB, y un par de cuatro pines adicionales para ventiladores de CPU y caja. El chip de audio es un ROG SupremeFX con un códec S1220A, que permite la reproducción a 32 bits y 192 kHz.