HomePod, la cápsula casera, es el nuevo producto de Apple y está orientado a todos aquellos que les gusta escuchar música de calidad en su hogar. Dentro del sonido que pueda ofrecer un altavoz wifi, por supuesto. Pero la compañía se ha encargado de mejorarlo el máximo posible con una serie de innovaciones tecnológicas para que los audiófilos no tengan quejas.
En el interior de este altavoz se incluye un chip A8 de Apple que controlará en tiempo real la reproducción de la música, pero también la información que recoja del entorno. Porque en función de en dónde se coloque, tendrá que realizar cambios a la calidad del sonido con una ecualización automática, unida a la conformación de haces —un tipo de filtrado espacial para centrar la potencia en la dirección adecuada— de los altavoces.
Tendrá también en cuenta el posible rebote de las ondas sonoras en las paredes para que la experiencia musical sea la mejor posible. Para ello, el HomePod incluye un potente altavoz de graves superior y siete de agudos direccionales. Es una de esas cosas que es difícil de valorar hata que no se prueba, por lo que habrá que dejárselo a los expertos decidir si tiene la calidad que Apple asegura.
Por otro lado, el HomePod dispone de cuatro micrófonos omnidireccionales para poder gestionar la reproducción musical de Apple Music. Pero también dispone de Siri, por lo que se podrá gestionar el calendario, solicitar información del tiempo u otra información de Internet, controlar por voz los distintos dispositivos de domótica del hogar, y todo lo que se puede esperar de un dispositivo de este tipo.
Por último, Apple ha incidido que toda la información intercambiada con sus servidores se hará de manera anómima, con un identificador anónimo y conocido como Siri ID, y que además se enviará cifrado. Es un apartado en el que Apple sigue poniendo especial atención porque en el fondo la compañía no monetiza la información de los usuarios como sí hacen Amazon o Google con sus equivalentes a HomePod.
El precio del HomePod es de 349 dólares, y estará disponible en diciembre en EE. UU., Reino Unido y Australia, y en 2018 se extenderá a otros países e idiomas que no sean el inglés.
