MSI presentó en el pasado Computex de junio uno de sus últimos mini-PC, que se añade a la línea Vortex a la que pertenece el casco de caballero Vortex G65 por su curiosa forma. Se trata del Vortex G25, que es un modelo aún más pequeño pero al que no le falta potencia, ya que incluye una GTX 1070 de 8 GB de VRAM, junto con un procesador Core i7 de 7.ª generación.
Aunque de momento no están las características completas, tiene un volumen de 2.5 litros, y similar al espacio que ocupa una PlayStation 4. Incluye cuatro bancos de memoria para hasta 64 GB de DDR4, y en el terreno de las conexiones dispone de cuatro USB 3.0, un Thunderbolt 3, un USB 3.0 tipo C, dos de audio de 3.5 mm, dos HDMI, salido de audio óptica, y un Ethernet.
El equipo se ha empezado a distribuirlo, aunque la compañía no ha indicado todavía el precio oficial. Es un modelo que puede ser interesante para los que quieren un mini-PC en el salón y que haga de consola, y por tamaño lo puede hacer a la perfección. El mayor problema con estos equipos, como siempre, será el ruido que puedan hacer, ya que ni las consolas son silenciosas —y según el modelo, incluso ruidosas—.
Vía: Guru3D.
