Google ha tenido una mezcla de recepción positiva por parte de la crítica al Pixel 2 y de críticas negativas por los usuarios que han ido descubriendo problemas de los teléfonos. De momento no ha sido nada que no se haya podido solucionar mediante actualizaciones de Android, pero la que está a punto de llegar, Android 8.1, va a activar un procesador de imagen desarrollado por Google junto a Intel.
Este chip incluye ocho unidades de procesado de imagen —IPU, que vienen a ser núcleos de procesamiento—, su propia RAM, conexión PCIe al procesador principal, y un núcleo Cortex-A53 para gestionar la carga de trabajo. Resulta un diseño interesante por el mero hecho de que Google se está adentrando cada vez más en el desarrollo de sus propios chips, y no sería raro que en un futuro cercano sorprendiera con su propio sistema en chip (SoC) para sus futuros Pixel.
Este chip se llama Pixel Visual Core, y permitirá tomar imágenes HDR+ cinco veces más rápido y con un ahorro de consumo del 90 %. También permitirá la ejecución de otro tipo de cargas relacionadas con la inteligencia artificial, aprovechando la biblioteca de redes neuronales (NNAPI) que también introduce Android 8.1. Puesto que la cámara del nuevo Pixel es la mejor del momento según la web DXoMark, esto podría darle una pequeña ventaja adicional. Será interesante ver lo que Samsung presente en el Galaxy S9 en torno a marzo del próximo año.
Las imágenes de la segunda versión beta de Android 8.1 está disponible en la web de Google para los teléfonos Pixel, Pixel 2, Pixel C, Nexus 5X y Nexus 6P. La distribución de la versión final de Android 8.1 tendrá lugar en diciembre.
Vía: Ars Technica.