Intel ha prometido que en este año llegarán los procesadores fabricados con su proceso de 10 nm, y previsiblemente aparecerán en la segunda mitad del año. Como suele ser habitual en una nueva generación, se espera que los primeros procesadores estén orientados a portátiles, y por tanto pertenecerían a la generación Cannon Lake U. Eso sí, estos procesadores formarán parte de la 8.ª generación y no de la 9.ª generación de procesadores Core de Intel, según ha indicado previamente la compañía.
Los procesadores Ice Lake, fabricados con un proceso de 10 nm+, serían los que iniciaran la 9.ª generación. Mientras tanto, Intel ha tenido un desliz en uno de sus documentos, revelando que el desarrollo de la generación Cannon Lake va a buen ritmo. La referencia a un Cannon Lake U de dos núcleos de procesamiento más una gráfica integrada GT2 (2+2), así como otro de dos núcleos sin unidad de procesamiento gráfico integrada (2+0), han aparecido en el calendario de actualizaciones de microcódigo de la compañía —ya eliminada la referencia—.
De la referencia ahí indicada se puede inferir que Intel ya ha hecho al menos una producción de prueba, en pequeñas cantidades. Esto al menos apunta igualmente a que Intel los tendría listos sin problemas este mismo año, y quizás en torno al verano.
Vía: AnandTech.