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Si estás deseando cambiar de PC y no sabes qué procesador elegir, quizás esta pequeña guía te ayude a decidirte. Los procesadores más económicos suelen ser buenos para un uso ofimático, incluso para un PC para juegos/gaming acompañados de una tarjeta gráfica económica. Si eres un usuario más avanzado, necesitarás un procesador más potente y caro, sobre todo si haces diseño gráfico, computación o te gusta jugar a la máxima calidad posible a 4K en juegos muy exigentes, o se quiera jugar a una alta tasa de refresco de 144 Hz, por ejemplo.

Una de las «invenciones» de la mercadotecnia de este año, iniciada a mediados del pasado, es la de llamar «PC para inteligencia artificial» a todo aquel que lleve un procesador con una unidad de procesamiento neuronal (NPU). He criticado mucho esa nomenclatura porque es como decir que un PC actual sin NPU no puede ejecutar nada de IA. Probablemente muchos PC sean mucho mejores en este campo que los procesadores actuales y del futuro cercano con NPU, y NVIDIA va a explotar esta tontería de los publicistas de Intel, AMD y Qualcomm.

Intel va a renovar hacia finales de año sus procesadores de sobremesa, y es previsible que inicialmente lance los desbloqueados para sobrefrecuencia. Serán parte de los Arrow Lake S, con una configuración de chíplets, y una nueva arquitectura que aparentemente eliminará la tecnología multihilo simultáneo para darle a los núcleos mucha más potencia mononúcleo. Los primeros modelos K serían, según los últimos rumores, el 245K, 265K y 285K dentro de la línea Core Ultra, por lo que va a haber un claro cambio de nomenclatura por parte de Intel.

En las últimas semanas ha habido cierto runrún debido a informes de ciertos usuarios de procesadores Core de 13.ª y 14.ª generación asegurando que había problemas de estabilidad en sus equipos. Con tarjetas gráficas potentes, como la RTX 4080, la CPU no podía mantener el tipo y provocaba tirones. No ocurre de manera general ni en todos los juegos, por lo que Intel ha estado investigando el problema. Ha concluido que el problema recae en los fabricantes de placas base.

Intel ha estado haciendo cambios en los últimos tiempos a la forma en la que informa de su situación económica para desligar Intel Foundry del negocio principal de la compañía. Básicamente haciendo unos cálculos de ingresos y costes si hubiera operado como fundición para la propia Intel en los últimos años, y el resultado es más bien negativo. Debido a que Pat Gelsinger quiere que sea una pieza clave en el entramado de Intel, la división de Intel Foundry ha acelerado el gasto y duplicado sus pérdidas en el T1 2024, lo cual también ha lastrado a los resultados globales de la compañía.

Intel anunció hace unas semanas la versión 1.3 de su escalado temporal por inteligencia artificial, llamada XeSS, con una importante mejora a la tasa de fotogramas y a la calidad gráfica. Esto lo sitúa al nivel de lo que se puede conseguir con FSR y DLSS, y más en la línea del segundo que del primero en cuanto a calidad gráfica. Al menos esa es la teoría, porque se necesitan juegos para poner frente a frente a DLSS, FSR y esta versión XeSS 1.3. Dos juegos que se actualizan con esta versión son Horizon: Forbidden West y Avatar: Frontiers of Pandora.

Intel ha estado perdida en el entorno de los centros de datos durante los últimos años lo cual le ha cedido buena parte de su cuota de mercado en procesadores x86. Ahora mismo las compañías optan mucho por procesadores ARM para ciertos usos, pero en eso poca mano tiene la compañía. Con los próximos Xeon 6, la serie Granite Rapids, promete volver a ser competitivo, y uno de esos procesadores sería aparentemente el Xeon 6 6980P que ha aparecido en un rumor.

Intel se las promete felices con su próxima generación de procesadores con los que dará un buen salto de rendimiento mononúcleo. Ese salto será tan grande que le permitirá desactivar el multihilo en estos procesadores sin perder potencia, lo cual sería muy positivo para la mayoría de tareas del día a día e incluso juegos. Ahora han surgido nuevos rumores que apuntan a las características de los Lunar Lake V, que serían los que tendrán la RAM integrada en el encapsulado de la CPU.

Intel está centrada en dar vida a su catálogo de procesadores y eso pasa por lanzar este año una nueva generación más potente y más novedosa que el refrito que ha supuesto la serie Core de 14.ª generación. Por eso ha iniciado la descatalogación de los Core de 13.ª generación, y específicamente los del sufijo K para entusiastas y que se pusieron a la venta en septiembre de 2022. Ni dos años llevan en el mercado.

Cuando se habla de procesadores con IA es como si los procesadores actuales y pasados no fueran capaces de procesar ese tipo de cargas. A lo que se refieren en realidad, dejando la estúpida mercadotecnia a un lado, es a la inclusión de una NPU en los procesadores para PC. Lo cual ni siquiera es una novedad en el sector consumo porque llevan en los móviles desde hace muchos años, y en el sector PC de manera más general desde 2020 con los Mac de Apple. Pero todo lo que ponga «IA» parece que vende más, como hasta todo lo que tenía que ver con la realidad virtual, por lo que los Lunar Lake son procesadores con IA y darán más de 100 TOPS en potencia de cómputo.