Google es una de las empresas tecnológicas que más están apostando por la computación cuántica, y ha querido demostrar sus avances con la presentación del un nuevo procesador cuántico llamado Bristlecone. Lo ha hecho delante de la Sociedad Estadounidense de Física en su reunión anual que tiene lugar en Los Ángeles. Este chip incluye la elevada cantidad de 72 cúbits, que para lo que están usando otras compañías en sus proyectos es una cantidad superior, como los 49 cúbits del chip de Intel.
La compañía ha incidido en la baja tasa de errors de que disponen sus procesadores en los estudios preliminares que ha realizado, que se sitúan en un 1 %, aunque baja al 0.6 % al leer de puertas cuánticas de dos cúbits, y un 0.1 % de un cúbit. El principal problema a la hora de hacer funcionar los procesadores cuánticos es que son muy susceptibles a cualquier cambio en el entorno que puede llevar a errores de lectura, y por tanto están aún lejos de poder utilizarse de manera generalizada.
Bristlecone utiliza los mismos principios de diseño que ha usado Google para su matriz lineal de nueve cúbits que ha usado previamente, y los contactos de este chip —que no son precisamente pequeños— mantienen una forma de rejilla similar. Google ha incidido en que, si se puede llevar uno de estos procesadores cuánticos de 49 cúbits con menos de un error en dos cúbits inferior al 0.5 %, eso podría llevar a que los procesadores cuánticos se pudieran empezar a utilizar para obtener más rendimiento del que son capaces los procesadores actuales.