MSI no es ajena a la renovación de portátiles que está habiendo con motivo de los nuevos procesadores Coffee Lake H y ha presentado una buena ración de modelos renovados. De lo más interesante es el GS65 Stealth Thin que cuenta con una carcasa de aluminio con un tamaño de 357.7 × 247.7 × 17.7 mm y un peso de 1.8 kg, que por la potencia de lo que lleva dentro no está nada mal. Tiene unos marcos mínimos de pantalla de 4.9 mm, lo que le da un aspecto realmente bueno, y dispone de remates en dorado.
Esa pantalla es de tipo IPS de 15.6 pulgadas con un tiempo de respuesta de 7 ms y 144 Hz de refresco, con resolución de 1920 × 1080 píxeles (FHD), pero no menciona que incluya G-SYNC. El procesador es un Core i7-8750H de doce núcleos lógicos, con frecuencia base de 2.2 GHz y turbo de 4.1 GHz, que permitirá mover sin problemas GTX 1060 y GTX 1070 con las que se pondrá a la venta. La memoria incluida es DDR4 a 2400 MHz en dos bancos de memoria, y para almacenamiento se incluyen dos ranuras M.2 compatibles con PCIe 3.0.
Su batería es de 84 Wh, que es también destacable para el tamaño que tiene el portátil. Se le acompaña con una fuente de alimentación que es un 28 % más pequeña que la incluida en el GS63 —que también ha sido renovado—. La conectividad incluye un Thunderbolt 3, tres USB 3.0, dos de audio de 3.5 mm, un Ethernet, mini-DisplayPort 1.4, HDMI 2.0a, Bluetooth 5.0 y wifi 802.11 ac. El teclado está retroiluminado, pero sin RGB ya que tiene un diseño más fino y elegante que la mayoría de portátiles para juegos.
Su precio de partida con 512 GB de SSD, 16 GB de RAM, y una GTX 1060 se sitúa sobre los 2200 euros. Llega a las tiendas el 16 de abril.