Nintendo ha recuperado la senda de tener unas cuentas bien saneadas gracias al éxito rotundo e instantáneo que se convirtió la puesta a la venta de la Switch en marzo del año pasado. Aunque muchos la tildaban como una consola que iba a fracasar debido a la carencia de potencia del procesador Tegra X1 que lleva en su interior, Nintendo lo suple con algo más importante: juegos de calidad. En la presentación de resultados del año fiscal que acaba en el 31 de marzo, la compañía ha indicado que ha obtenido unos beneficios de 1600 millones de dólares.
Por comparación, en el año fiscal anterior obtuvo unos beneficios de 270 M$, lo que permite a la compañía dejar atrás los números rojos de la época de la Wii U. Nintendo también ha actualizado los datos de ventas de sus consolas, indicando que ya se han vendido 17.79 millones de Switch, y hace bastante tiempo que superó las 13.56 millones que vendió la Wii U en sus cinco años de estar a la venta. La 3DS está en unos saludables 72.53 millones de unidades.
En cuanto a los juegos, Nintendo ha vendido ya 10.41 millones de unidades de Super Mario Odyssey, 9.22 M de Mario Kart 8 Deluxe, 8.48 M de The Legends of Zelda: Breath of the Wild y 6.02 M de Splatoon 2. El resto de juegos de la compañía tienen ventas más flojas, con 2.29 M para 1-2 Switch, 1.85 M para ARMS, 1.31 M para Xenoblade Chronicles 2 y 1.26 M de Kirby Star Allies.