Apple renovó hace unos días los MacBook Pro de 13 y 15 pulgadas y, a parte de nuevos procesadores, no traen grandes cambios. El mayor que incluyen tiene que ver con el teclado, una nueva generación con los interruptores de mariposa que ha usado en los modelos de 2016 y 2017. Los teclados de estos modelos podían tener problemas al pasar suciedad entre ellas y hacer que los interruptores se bloquearan o dejaran de funcionar totalmente.
Tras decir que «sí pero no», la compañía finalmente confirmó el problema a finales de junio. Ofrece la sustitución del teclado de los MacBook Pro afectados, y también abarca a los MacBook desde 2015. Pero en la nueva generación de MacBook Pro, el interruptor de mariposa ahora lleva una membrana para evitar que la suciedad se meta por debajo y bloquee el mecanismo.
La patente para ello fue solicitada por Apple en septiembre de 2016, por lo que es más que probable que la compañía no fuera ajena a este potencial problema tras presentar el MacBook de 2015. Sea como sea, Apple finalmente corrige este potencial problema de los Mac, aunque no está claro si la sustitución a la que tienen derecho los Mac desde 2015 incluirá estos nuevos interruptores.