Intel tiene un problema muy gordo por delante, y uno que se va a notar en sus ingresos del tercer trimestre, pero sobre todo del cuarto trimestre como no haga algo para atajarlo. Los precios de sus procesadores se están disparando, como han apuntado desde hace semanas multitud de rumores, y esta semana es cuando está entrando en efecto ese vaticinado aumento de precios
El precio del Core i7-8700K, que era de lo más vendido durante el verano, pasado de los 300 euros a los 420 euros esta semana.
El Core i5-8400 corre la misma suerte, y de hecho en los últimos 60 días ha pasado de 170 euros a los 200 euros, si bien en PC Componentes ya está a 280 euros, por lo que el precio de Amazon de 200 euros no creo que dure mucho.
El Core i3-8100 ha corrido la misma suerte esta semana, pasando de los 100 euros del verano a los 170 euros, lo que supone un 70 % de sobrecoste debido a la inutilidad de Intel de mantener la producción de chips a 14 nm. Ya voy viendo claro que el despido de Kraznich fue motivado por la que se avecinaba, y no por una relación inapropiada con alguien de la compañía.
¿Y qué pasa en la gama baja? Pues más de lo mismo. El Pentium G4560, muy popular para los equipos económico, y su sustituto Pentium Gold G5400, han corrido la misma suerte, pasando de unos 50 euros a los 75 euros.
Si queréis cambiar de equipo, lo recomendable es mirar a los procesadores de AMD. Si bien no es óptimo para una tarjeta gráfica potente como las próximas RTX 2080 y 2080 Ti, tampoco se queda tan lejos de rendimiento en juegos el Ryzen 7 2700X como para pagar un 30 % más por el Core i7-8700K, cuando este procesador de AMD está por 325 euros. Salvo que se quiera lo mejor de lo mejor, que nunca es lo óptimo para un equipo, la opción de AMD es lo único que parece que va a ser viable en las próximas semanas hasta ver hacia dónde se mueven los precios de los procesadores de Intel. Aunque, eso sí, espero que AMD y las distribuidoras no lo aprovechen para subir precios, como parece que hay ciertos indicios de tendencia en las últimas semanas. O, al menos, lo que está claro es que los Ryzen 2000 no están bajando de precio como ocurrió, y rápido, el año pasado con los Ryzen 1000.