En el último par de años está habiendo mucho movimiento entre las empresas que desarrollan microprocesadores de todo tipo. Si bien las grandes noticias se han centrado en la huida de Raja Koduri a Intel para crear nuevas unidades de procesamiento gráfico (GPU), también ha habido movimiento en el sector de las unidades centrales de procesamiento (CPU). Sobre todo entre las empresas que desarrollan procesadores de arquitectura ARM.
Entre ellas, Apple ha sido la que más ha evolucionado esta arquitectura, haciendo que ahora mismo compita en potencia con los procesadores de Intel de gama baja, pero potencialmente en breve con los de gama media. Uno de los encargados de esta gran evolución ha sido Gerard Williams, que ha abandonado la compañía tras nueve años.
Williams recaló en Apple tras pasarse doce años en la compañía inglesa ARM que cede el nombre a la arquitectura, por lo que es un gran experto en ella. En su estancia en Apple ha supervisado la disposición física de los distintos sistemas en chip que ha creado la compañía, que se engloban en la serie A, como el más reciente A12 Bionic.
En 2017 abandonó Apple otro ingeniero dedicado a la plataforma ARM de la compañía, Manu Gulati, cazado en este caso por Google. Por su parte, Williams no se sabe a dónde va a ir, pero es coautor de al menos sesenta patentes de Apple relacionadas con sus procesadores.