Dell está siendo bastante explícito a la hora de airear sus quejas sobre la escasez de procesadores de Intel, ya que el sector está experimentando un crecimiento tras años de contracción y eso significa que está ingresando menos de lo que podría. El motivo es que la escasez de procesadores de Intel está evitando que fabrique más equipos, y por tanto ha empezado a evaluar una asociación a largo plazo con AMD.
El director económico de la compañía, Tom Sweet, además ha expresado su preocupación por el hecho de que la escasez de producción de Intel continúe hasta la segunda mitad de 2020. Dell no es una extraña a la hora de trabajar con procesadores de AMD o sus tarjetas gráficas, pero precisa de unas negociaciones más formales para asegurarse que AMD destine un cierto volumen de producción a cubrir sus necesidades a un precio mejor.
Otros fabricantes de portátiles, como MSI, ya han empezado a usar procesadores de AMD en sus equipos para juegos, como el Alpha 15, aunque ciertamente los Ryzen 3000 de movilidad tienen poca cabida a la hora de acompañarlos de las tarjetas gráficas más potentes por lo que se están quedando en los modelos más económicos —pero igualmente interesantes—.
El problema de estas negociaciones Dell-AMD, como he dicho muchas veces, es que esta última no fabrica directamente sus procesadores y en realidad no puede digerir adecuadamente aumentos de demanda. El éxito del proceso de 7 nm de TSMC está haciendo que se retrase la entrega de los lotes de chips de unas semanas a varios meses, y eso se está viendo también en el precio de los Ryzen 3000, que tras una pequeña bajada el PVP se ha igualado prácticamente al PVPR.
Mirando a otros modelos, como el 3950X, es un rara avis en las tiendas, alcanzando un precio de 1000 a 1200 euros en lugar de los 830 euros que debería tener. Por no mencionar los problemas de producción de los chips gráficos Navi para las RX 5000 y que ha retrasado la llegada de la RX 5500, anunciada hace dos meses, a principios de octubre.
Que Dell mire a AMD en realidad no son buenas noticias porque es un cliente que precisa de muchos procesadores y puede llevar al alza los precios de la compañía, perjudicando al final al consumidor. Pero por otro lado, si AMD se hace con más cuota de mercado se eliminaría la presión sobre Intel y los procesadores de esta podrían bajar sustancialmente de precio, o hasta ponerse a su PVPR.
Vía: Tom's Hardware.