Una de las novedades de NVIDIA en la presentación de las primeras RTX 30 fue Reflex, un sistema para reducir la latencia en juegos. Ahora llegan los controladores GeForce 456.55 WHQL que habilitan su uso en dos juegos como son Modern Warfare y Warzone, dos de la serie Call of Duty. Reflex es un sistema que tiene tres vertientes pero que precisa inicialmente de que los programadores integren la API en sus juegos, y es lo que ha hecho Activision. Los otros son tener periféricos compatibles y monitor con módulo G-SYNC para analizar el tiempo de respuesta, pero eso se escapa del ámbito de los controladores GeForce.
NVIDIA también optimiza el funcionamiento de los controladores para Star Wars: Squadrons y corrige una serie de errores con juegos bajo Vulkan que no permitía modificar la latencia de renderizado en GeForce Experience, elimina varios monitores que habían sido incluidos como compatibles con G-SYNC, un cuelgue del contenedor de los controladores al salir del modo suspenso o hibernación, entre otros.
