China lleva casi dos años con bloqueos de algún tipo a sus tratos comerciales con empresas estadounidenses o aquellas que hacen uso de tecnología estadounidense. Ante la mayor demanda de semiconductores, que se fue haciendo visible desde mediados del año pasado, China tiene casi imposible conseguir equipo litográfico comprado nuevo a los fabricantes, así que ha encontrado un filón de oro en Japón. O, más bien, Japón ha encontrado un filón de oro en China.
Las compañías chinas están comprando maquinaria antigua que hace unos años no valía nada pero que actualmente alcanzan precios en segunda mano por encima de los 750 000 euros, o unos 100 millones de yenes. La demanda de China es tal que prácticamente están vendiendo el 90 % de esta maquinaria antigua al país. Eso sí, no todo el equipamiento se compra para ponerlo en marcha, sino solo una parte. El resto se compra para almacenarla por si acaso, aunque seguro que más de una máquina es despiezada para analizar sus secretos o como piezas de recambio.
El equipo de segunda mano no está incluido en las restricciones comerciales impuestas a China por Trump y continuadas por Biden, y de hecho se prevé que el presidente demócrata vaya incluso más allá en algunas de estas restricciones. Para que no se diga que la polémica de su hijo Hunter de estar comprado por los chinos y de estar blanqueando dinero vaya a hacer que relaje las medidas. Biden ha indicado que no ve motivos por los que levantar el veto a empresas como Huawei, por lo que la guerra comercial entre China y EUA va a continuar.
Vía: TechSpot.
