ZTE ha anunciado un par de móviles de gama alta, los Axon 30 Pro y Axon 30 Ultra, aunque en este caso cambian más en aspecto que en características. El aspecto del Pro es más como el del iPhone, mientras que el Ultra se parece más a algunos móviles de Samsung, casi sin marcos y con la pantalla redondeado hacia los laterales. Ambos disponen de una pantalla con balazo en la parte central superior de la misma.
Empezando por el Axon 30 Pro, la pantalla es de 16.9 cm (6.67 in) con una resolución de 2400 × 1080 píxeles, de tipo OLED, reproduce contenido de alto rango dinámico y tiene un refresco de 120 Hz y muestrea los toques a 360 Hz. Cubre el 100 % de la escala de color DCI-P3 y reproduce contenido de alto rango dinámico en formato HDR10+.
El procesador es un Snapdragon 888 con al menos 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento. Tiene una batería de 4200 mAh con carga rápida de 55 W a través de un USB tipo C. Cuenta con wifi 802.11ax, Bluetooth 5.2, NFC y 5G, así como doble ranura nano-SIM.
El sistema de cámaras trasero incluye un sensor IMX682 de 64 Mpx principal con apertura ƒ/1.7 y graba vídeo a 4K y 60 f/s, tiene un secundario de 64 Mpx de ultra gran angular de 120º, un terciario de 5 Mpx de fotomacrografía y otro de 2 Mpx de profundidad. La cámara frontal es de 16 Mpx y graba vídeo a 4K y 30 f/s.
Su precio en la presentación en China es de 3000 yuanes o unos 383 euros euros al cambio directo.
En cuanto al Axon 30 Ultra, el primer cambio relevante es la ampliación de la batería a los 4500 mAh con carga rápida de 66 W. También cambia el refresco de pantalla a los 144 Hz. En cuanto a las cámaras traseras, la principal tiene un sensor mejor IMX686 de Sony con apertura ƒ/1.6 que graba hasta a 8K y 30 f/s. Mantiene la de ultra gran angular. La tercera pasa a ser de 64 Mpx con una apertura de ƒ/1.9 similar a la principal. La cuarta es de 8 Mpx de zum óptico de cinco aumentos. Incluye al menos 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento.
Su precio en la presentación en China es de 4700 yuanes o unos 600 euros al cambio directo.
