En los últimos meses se están sucediendo apagones, incendios y otros desastres en las fábricas de fabricantes de semiconductores y otros proveedores de componentes del sector de la electrónica. Todo de manera puntual, pero lo suficiente como para afectar aún más la producción de dispositivos que está lejos de cubrir la demanda. El último infortunio lo ha sufrido TSMC, la cual se ha visto afectada por un apagón que ha afectado a su fábrica 14A P7 situada en el Parque Científico Taiwán Sur.
Las buenas noticias es que la fábrica está dedicada a la fabricación de obleas de 40-90 nm por lo que no ha afectado a las que son más necesarias en el sector PC y dispositivos móviles como aquellas fabricadas a 5 nm y 7 nm. El apagón se debió a una excavadora llevándose por delante una línea eléctrica de una zona de construcción.
La energía de reserva entró en efecto poco después y los empleados de la fábrica pudieron minimizar el impacto en la producción. En total unas 40 000 obleas estaban en producción en la fábrica, y las no recuperables supondrán en torno a los 28-35 millones de dólares de pérdidas para la compañía. Estas obleas de 40-90 nm suelen ir destinadas a microcontroladores, sensores y otros chips más simples como por ejemplo los usados en el sector de la automoción, que podría ser el sector que note más este breve apagón.
Vía: Tom's Hardware.