Intel quiere darle un nuevo impulso a su tecnología Optane con la serie H20, la cual incluye en esencia unidades de estado sólido con una pequeña memoria Optane a modo de caché para aumentar su velocidad. Es una forma de no tirar la toalla con un producto que realmente no ha tenido mucha acogida entre el consumidor, aunque en el entorno empresarial ha despertado mayor interés.
Esta serie se vende en formato M.2 2280 en capacidades de 512 GB y 1 TB de NAND 3D de tipo QLC fabricada por Intel, e incluyen una memoria 3D XPoint de 32 GB. La interfaz es PCIe 3.0 ×4 y usan un protocolo NVMe 1.3, e incluye cifrado por hardware mediante AES-256.
La velocidad máxima de lectura/escritura secuencial es de 3400/2100 MB/s y la aleatoria es de 390/290 kIOPS, mientras que la durabilidad llega hasta los 370 TB escritos. Una ventaja del rendimiento de estas unidades es su menor latencia gracias al sistema de caché (7-12 µs), y que son de bajo consumo, apenas 170 mW activos cuando lo normal son 2-4 W, y 35 mW en reposo. El rendimiento y consumo reales va a variar mucho según el tipo de carga.