Una de las mayores quejas de los ecologistas hacia las criptodivisas es el enorme consumo que realizan durante el proceso de criptominado. Aunque han salido alternativas verdes como Chia, el actual protocolo rey Bitcoin es poco energéticamente eficiente. Incluso Ethereum es un protocolo que consume mucho, pero a su vez mucho menos que Bitcoin. Por eso hay empresas y países que buscan facilitar el criptominado con energía limpia, como es el caso de la empresa Talen Energy.
La compañía va a aprovechar su central nuclear de Susquehanna, situada en Pensilvania (EUA), aunque hará reformas para poder expandir la producción de energía. Esta central nuclear que entró en funcionamiento en 1983 tiene actualmente dos generadores de vapor de 1350 MW con una generación real de unos 2500 MW. Eso no se va a tocar, y por tanto Talen Energy va a ampliar sus operaciones en la zona para dar cabida al criptominado y a un centro de datos.
El nuevo campus estará completado en el segundo trimestre de 2022 con una capacidad inicial de 164 MW y posteriormente alcanzará los 300 MW gracias a dos reactores nucleares y dos subestaciones independientes. La producción se podrá expandir a 1 GW en caso de ser necesario.
Como no puedo hablar de estas cosas sin dar mi opinión —por eso esto es un blog y no un periódico—, estoy de acuerdo en que la energía nuclear es segura y que debería sustituir a las plantas de carbón y gas si se quiere reducir al máximo lo antes posible las emisiones de CO2. Una pequeña parte de los actuales ecologistas aceptan que es la solución más razonable porque el actual modelo energético es insostenible y se necesita la energía para hacer girar al mundo. Pero de ahí a construir plantas nucleares para criptominar…
Me parece más adecuada la opción de El Salvador de construir una central de energía térmica en un volcán para alimentar un centro de criptominado, lo cual me parece una energía realmente limpia y sin riesgos que es la que debería usar la criptominería. Tampoco es que lo rechace de plano porque actualmente hay en torno a 450 centrales nucleares en el mundo, con medio centenar más en construcción, por lo que tampoco se puede decir que una más o una menos vaya a marcar alguna diferencia. Pero crear centrales nucleares específicas para criptominería es expandir el problema, no solucionarlo. Un problema ecológico y energético lucrativo, eso sí. La solución debería pasar por regular las criptodivisas.
Vía: Tom's Hardware.
