Diversas placas base serie 600 de Intel permite modificar el reloj base de los procesadores. Se trata de una forma ligera de overclocking pero que permite ganar un rendimiento sustancial. En el caso del Core i5-12400 en una Z690 ROG Strix de ASUS, de las caras, se puede conseguir un 33 % más de rendimiento. Eso sí, con temperaturas del procesador que alcanzan los 93 ºC con la refrigeración Laminar RM1 de serie y el consiguiente ruido que hará su ventilador. Ahora Der8auer ha probado la capacidad de subida del i5-12400 en una B660 ROG Strix que cuesta sobre los 250 euros.
El resultado en temperaturas es similar, pero el rendimiento conseguido en Cinebench R20 es en torno a un 25 % superior. Para de los 4700 puntos a unos 5900 puntos. Esto lo sitúa en torno al rendimiento del Ryzen 7 5800X. El consumo se va a los 117 W desde los 75 W normales del i5-12400. No todas las B660 permitirán este tipo de sobrefrecuencia y variará bastante entre fabricantes cuáles lo permiten y cuáles no. Por ejemplo, se dice que estaría limitado a aquellas B660 con DDR5.
Esto se trata más de una curiosidad que de algo útil ahora mismo. Por lo que cuesta el i5-12400 y la placa base —unos 450 euros—, se puede comprar un i5-12600K y una B660 más barata —también unos 450 euros— y se obtendrá bastante más rendimiento sin hacer nada. Cuando empiecen a bajar las placas base B660 habrá que remirar esto para ver si pudiera ser interesante o no.
Vía: Videocardz.