El nuevo PC de mano de ASUS, el ROG Ally, al final no le está haciendo tanta competencia al Steam Deck, aunque tiene mayor potencia gráfica y de procesamiento en general y una pantalla bastante mejor, pero a un precio bastante mayor. También es un dispositivo grande al que iFixit le ha echado un vistazo a su interior. De entrada, el ROG Ally es bastante más fácil de desmontar ya que simplemente hay que quitar cuatro tornillos y listo: la carcasa sale fácilmente.
Los componentes de su interior son de fácil sustitución, incluidos los joysticks, sin necesidad de sustituir toda la PCB a la que van atornillados, y la SSD, que son dos elementos que pueden querer cambiarse en algún momento. Los primeros por desgaste, que según las leyes de la UE y otros países ASUS debería proporcionar repuestos durante una larga temporada, y la segunda para conseguir más almacenamiento. La batería será fácil de cambiar, mientras que la pantalla es el único elemento que va a ser bastante difícil de cambiar.