Esta semana he estado bastante liado como para cubrir todo lo que ha ocurrido, pero uno de los temas candentes ha sido el de la prohibición de vender el iPhone 12 en Francia. El gobierno del país alega que emite más radiación de la permitida cuando se tiene pegado al cuerpo, por lo que hay dudas sobre su impacto en el organismo. Obviamente Apple ha asegurado que eso son tonterías y que cumple con todas las normativas, pero ante la posibilidad de que Francia le obligue a devolverle el dinero a todos los compradores, ha ideado un plan: una actualización de firmware.
Con ella, Apple limitaría la potencia de transmisión y por tanto debería cumplir con la forma que tenga el gobierno francés de medir la radiación electromagnética de los móviles. Pero, obviamente, si limitas la potencia de las antenas los iPhone 12 van a tener una cobertura peor. Francia ha indicado que cuando la actualización esté disponible procederá a valorar de nuevo la radiación emitida. Los gobiernos de Bélgica y Dinamarca han asegurado que en sus pruebas el iPhone 12 sí que tiene una radiación electromagnética dentro de los parámetros recomendados.
Vía: EnGadget.