Una de las grandes adquisiciones de los últimos años en el mundo de la tecnología es ya la de VMware por parte de Broadcom, porque ambas compañías han cerrado finalmente la compra tras recibir el visto bueno de todas las agencias reguladoras de la competencia. No ha sido un camino de rosas, porque Broadcom ha tenido que hacer concesiones para despejar dudas de la Unión Europea y otros países, pero es lo normal en una compra de 61 000 millones de dólares.
La adquisición se inició en mayo de 2022, por lo que se ha necesitado año y medio para superar todos los trámites burocráticos, que para el nivel de esta transacción es lo habitual… si todo va bien. La de Activision Blizzard King requirió de unos meses más debido mayormente a la metedura de pata de Reino Unido por ser novato en la regulación propia de la competencia una vez que se salió de la Unión Europea.
La compañía estaba en manos de Dell EMC con Michael Dell haciendo de presidente del consejo de administración, por lo que será el principal beneficiado por la venta de la compañía. VMware es una empresa que en 2023 ingresó 13 400 millones de dólares, por lo que engordará notablemente la cifra de negocio de Broadcom, situándola en torno a los 46 000 M$ anuales.
VMware desarrolla principalmente software de virtualización, que con el auge de los centros de datos de la última década supone la mayor parte del negocio. También produce equipamiento de almacenamiento, seguridad y redes, por lo que hay bastante sinergia con los chips que desarrolla y produce Broadcom.
