Las relaciones entre China y su provincia rebelde de Taiwán siguen tensas a nivel político aunque a nivel social la cosa esté muy calmada. Siempre hay que hacer el paripé de que te llevas mal con tu enemigo. Quizás por eso ahora un funcionario de Taiwán, que actúa en EUA de embajador porque no está reconocido como país, ha acusado a China de engañar, copiar y robar tecnología de las empresas de su país. Lo ha indicado así en una entrevista, pero como siempre, no ha dado ningún ejemplo concreto.
Las palabras de Alexander Yui han sido refutadas por un diplomático chino de la embajada, Liu Pengyu, el cual ha asegurado que «los avances científicos y tecnológicos de China nunca se hacen engañando o robando. Nuestro desarrollo se basa en nuestra fuerza, y confiamos en seguir fortaleciendo la capacidad de China de buscar su independencia e innovación tecnológica».
De cara al público, China ha dicho lo que diría cualquier país, porque todos espían y roban tecnologías de los demás cuando tienen la ocasión. Nada nuevo bajo el sol. Pero el tema está en que Taiwán considera que contratar a empleados de empresas taiwanesas es engañar, copiar y robar tecnología. Me imagino que si una empresa estadounidense hiciera lo mismo también lo criticaría. O seguramente no, aunque bien es cierto que las empresas chinas lo han hecho de manera agresiva en los últimos años. Pero también es verdad que empresas chinas como SMIC han sido condenadas por espionaje, pero también otras que no lo son como Samsung. No es algo que no haya ocurrido, pero cada vez es más raro, porque no es ni sencillo ni productivo.
Si es que hoy en día cualquier tecnología es tan compleja que es más fácil contratar a la gente que la ha creado para recrearla que robarla. De ahí las quejas del no embajador de Taiwán en EUA. Lo llevan haciendo Intel, AMD, Apple o NVIDIA muchísimo en las últimas dos décadas, y especialmente en la última, y nadie se queja de que sea espionaje, o que estén robando tecnologías o cualquier otra supuesta ilegalidad. Pero la situación política es la que es, y Taiwán tiene que hacer el paripé de confrontación con China.
Fuente: Reuters. Vía: Tom's Hardware.