Análisis: Arctic Freezer 36 review en español

ARCTIC renovó hace unos meses su gama de refrigeraciones y en ello incluyó su modelo más generalista por aire con el Freezer 36. En esta ocasión es un disipador de características similares pero con un doble ventilador con un PVPR por debajo de los 40 euros, aunque ahora, pasados unos meses, se puede encontrar sobre los 32 euros, dependiendo del momento. La compañía suele hacer refrigeraciones con una gran relación calidad-precio, por lo que en el análisis tengo que centrarme en si consigue mantenerla.

Videoanálisis

Desembalado y características

La refrigeración Freezer 36 de ARCTIC llega en la habitual caja azul de la compañía en la que se indica que solo es compatible con los zócalos AM4, AM5 y LGA 1700, aunque también lo es con el próximo LGA 1851. También destaca los seis años de garantía limitada que la compañía ofrece ante posibles fallos de fabricación, que es lo que viene a cubrir esos tres años adicionales en la Unión Europea. En la parte trasera están las características completas de la refrigeración y un código QR al manual en línea del producto.

Al abrir la caja se ve la parte inferior de la refrigeración con el habitual plástico protector en el que se avisa que se retire antes de instalarlo. Al tirar de él sale un bloque de cartón que abrá que ir retirando, por lo que viene bastante bien protegido. Luego están los dos ventiladores, igualmente protegidos por cartones, los cuales tienen un conector de cuatro pines y otro para conectarlos en cascada al mismo cabezal de la placa base.

En los laterales se encuentra otra estructura de cartón en la que va la placa de sujeción para los zócalos LGA 1700 y LGA 1851 de Intel protegida por un papel. Luego hay una bolsa de plástico con los topes, alas y tornillos necesarios para instalar la refrigeración, así como un poco de pasta térmica MX-6 de la propia ARCTIC y que es una muy buena pasta térmica.

Montaje

El montaje de la Freezer 36 es bastante sencillo y no lleva más de 20 o 25 minutos en total, y eso incluyendo mirar el manual para ver las indicaciones. El manual está disponible solo en línea, con el QR con la dirección estando situado en la parte trasera de la caja. Pero es muy sencillo y relativamente intuitivo para los zócalos AM4/AM5, aunque para los LGA 1700/1851 no lo es tanto y es en el que lo he montado.

Para el LGA 1700 se puede usar el destornillador incluido de cinco puntas para retirar el retenedor de la CPU. Se recomienda instalar el procesador primero y luego quitarlo, pero en la práctica es indiferente. Recomiendo quitarlo con la caja tumbada y con algo fijando la placa trasera a la que se agarra el retenedor de CPU, porque si se intenta instalar en vertical será más complicado hacer la instalación.

• AM4/AM5
• LGA 1700/1851

Tras quitar el retenedor preinstalado en la placa base —tenéis que guardarlo por si en el futuro cambias la refrigeración o hay que tirar de garantía de la placa base—, se tiene que poner el otro de color negro que proporciona ARCTIC, teniendo cuidado de que la flecha de una de las esquinas coincide con la del procesador. Luego se ponen cuatro tornillos haciendo la habitual figura en aspa, pero haciendo dos rondas, una para mantenerlos en su sitio y la siguiente para atornillarlos del todo.

Una vez que el retenedor está montado, se pone la pasta térmica MX-6 que se incluye. Es muy buena y es además barata, por lo que es la que llevo usando desde que la pusieron en el mercado, al igual que antes usaba la MX-4. Para la MX-6 he usado una jeringa que tengo a medio usar para no usar esta pequeña jeringa nueva. No ha cambiado la composición, por lo que el resultado térmico debería ser el mismo. La he aplicado trazando una línea recta a lo largo del procesador, aunque ARCTIC recomienda hacer un aspa. Lo importante es que se ponga bastante MX-6.

Ya solo queda poner el disipador encima, con el logo de ARCTIC en la parte superior quedando en la orientación adecuada. Los dos ventiladores van a presión, porque tienen un tornillo en cada esquina que sobresale un poco. Hay que atender al flujo de aire para posicionarlos, pero luego solo hay que hacer un poco de fuerza al posicionarlos sobre los agujeros del marco del disipador para que queden encajados. Por último queda solo conectar el cable de un ventilador al otro y este a la placa base. Listo.

El montaje me ha parecido supersencillo para el LGA 1700 aunque no me haya gustado tener que quitar el retenedor preinstalado. Es más por una cuestión práctica: que tendré que quitar este y poner el otro para la refrigeración líquida que uso habitualmente al terminar el análisis. Pero es una instalación rápida y sencilla. Con el zócalo AM4/AM5 pasa lo mismo, así que el montaje está bastante bien pensado.

Pruebas

El equipo de pruebas incluye una placa base Prime Z690-P de ASUS, 32 GB (dos de 16 GB) de DDR5-6400 CL 34 de Kingston, un Core i7-12700K, una fuente RM1000x Shift de Corsair, tres unidades M.2 2280 PCIe 3.0 y 4.0, y una SATA. He hecho las pruebas con la tapa lateral puesta de una caja H7 Flow para que sea una prueba más realista, la cualtiene cuatro ventiladores AF120 Slim de Corsair puestos y funcionando a 800-900 r. p. m. por lo que no se les oye y por tanto no introducen ruido adicional. El nivel de ruido lo he medido a un metro de distancia del lateral de la caja. Para las pruebas en juegos he recurrido a la RTX 4090 de PNY.

CPU

En Cinebench R23 haciendo pasar la prueba de treinta minutos el procesador suele andar entre los 80-84 ºC (∆52-56 ºC), teniendo en cuenta una temperatura ambiente de 28 ºC. El consumo de la CPU se sitúa en torno a los 165 W, y el equipo se sitúa en torno a los 260 W. En esta situación los ventiladores están a unas 1870 r. p. m. con un ruido de 33 dB. Se nota que están puestos, pero no es nada molesto teniendo el equipo debajo de la mesa, a la izquierda. No tiene componentes agudas que puedan resultar molestas. Si se retira la tapa de la caja la temperatura se mantiene similar.

En reposo el procesador está a 33-35 ºC (∆5-7 ºC), mientras que en tareas ofimáticas, navegación y cosas similares de poca envergadura cambia mucho entre los 35-42 ºC (∆7-14 ºC), por lo que el funcionamiento es silencioso, sin ningún tipo de ruido de fondo.

En juegos

Si se pasa a jugar, la situación es incluso mejor, y para ello he escogido Cyberpunk 2077 para dar algunos datos de interés. Con la RTX 4090, con resolución UHD y con DLSS, interpolación de fotogramas y calidad gráfica 'ultra', la temperatura de CPU se sitúa sobre los 63 ºC (∆35 ºC), con los ventiladores funcionando a unas 1200 r. p. m., y con un ruido en torno a los 30 dB del conjunto del equipo, con picos que pueden irse a los 68 o 70 grados, pero su funcionamiento es igualmente bastante silencioso.

La GPU en esta prueba sueles estar sobre los 68-70 ºC (∆40-42 ºC), y el equipo está consumiendo sobre los 520-580 W dependiendo del momento. Si se abre la tapa lateral del equipo la diferencia es mínima, de uno o dos grados menos de GPU manteniéndose similar la CPU, por lo que no hace falta modificar el funcionamiento de los ventiladores de la caja.

Prueba con sobrefrecuencia

Nunca he conseguido subir mucho las frecuencias del Core i7-12700K que tengo en modo manual, por lo que de manera fácil, sencilla y cortesía del BIOS de ASUS en automático. Con el OC Tuner I, los núcleos P se ponen a 4.8 GHz y los núcleos E en 3.8 GHz, mientras que el consumo pasa a los 195 W. En esta situación la temperatura se va a los 90-92 ºC (∆62-64 ºC), con algún pico hasta los 94 ºC (∆66 ºC), con los ventiladores sobre las mismas 1870 r. p. m. y por tanto un ruido igual.

Si se pone la posición OC Tuner II en la UEFI, los núcleos P se ponen a 4.9 GHz, y los núcleos E a 3.9 GHz, el consumo pasa a unos 210-225 W en Cinebench R23, por lo que la diferencia ronda los 50-60 W, aunque eso significa desplazar al procesador de su curva de voltaje y por tanto termina calentándose bastante más. En este escanario la temperatura es de unos 100 ºC (∆72 ºC), con mismo funcionamiento de ventiladores y mismo ruido. Es el tope operativo de la refrigeración y por tanto el rendimiento se ve mermado para mantener esa temperatura, así que no es una refrigeración adecuada para este uso de sobrefrecuencia.

Conclusión

ARCTIC ha evolucionado adecuadamente su disipador que mejor equilibra precio y rendimiento con el Freezer 36, aunque al final sigue siendo eso, una refrigeración generalista. Puede dejar en unas temperaturas razonables un procesador con un consumo de 165 W como es el 12700K, pero cuando se va a los 200 W con sobrefrecuencia se hacen evidentes sus limitaciones porque el procesador entrará en limitación térmica que en este caso se da a los 100 ºC.

Pero costando tan solo 32 euros no se podía esperar una refrigeración para procesadores de alto consumo. Para procesadores más baratos, como un Ryzen 5 9600X o 9700X que tienen un consumo máximo más comedido, sobre los 80-100 W, las temperaturas van a ser buenas. También lo son cuando se usa este 12700K en juegos como Cyberpunk 2077 ya que cae a los 60-65 ºC, y por tanto para ese escenario no sería la mejor refrigeración pero tampoco plantearía problemas de temperaturas.

La mayor pega que le podría poner es que no me termina de convencer el cambio del retenedor preinstalado en la placa base por el proporcionado por ARCTIC. Hay que tener mucho cuidado con el montaje para que el procesador no se mueva sobre los pines porque puede hacer que se doblen. No es la primera vez que me ocurre esto sin siquiera hacer el cambio de retenedor, teniendo en cuenta que cambio mucho las refrigeraciones y los procesadores en los equipos de prueba. Pero tampoco es una gran pega, y al final el sistema de montaje es supersimple.

Así que lo mejor que se puede decir de esta refrigeración es que tiene una gran relación calidad-precio, porque por 32 euros se obtiene un disipador con doble ventilador que puede mantener en temperaturas razonables, y a finales del verano, a un procesador de 150 W. ARCTIC vuelve a mantener una gran relación calidad-precio con esta refrigeración.

Puntuación