ASUS ha puesto a la venta una tanda de placas base X870 y X870E unos meses después de la llegada de los Ryzen 9000, aunque están pensadas para ellos. Todas tienen formato ATX, salvo una mini-ITX. Incluyen al menos una ranura PCIe 5.0 ×16 y dos ranuras M.2 2280 de tipo PCIe 5.0 ×4 y dos o tres PCIe 4.0 ×4 adicionales. Teniendo en cuenta las exigencias de AMD, todas también disponen de dos USB4 compatible con vídeo DisplayPort y datos.

Según el procesador que se instale alcanzarán mayor o menor frecuencia máxima de memoria a través de perfiles EXPO, que para los Ryzen 9000 serán los 8000-8200 MT/s, tras lo cual hay que ir a activar la sobrefrecuencia manual para ajustar los subtiempos y voltaje y que funcionen bien. El modelo ProArt integra un Ethernet de 10 Gb/s, y el resto al menos uno de 2.5 Gb/s. Cuentan con un circuito de audio avanzado, disipadores en todas las M.2, y otros detalles de calidad porque son placas base de al menos 300 euros.