AMD dio ayer el visto bueno para la puesta en circulación de las placas base con chipsets X870 y X870E las cuales ya están a la venta en la mayoría de tiendas. Pero también ha hecho oficiales diversos cambios que estaba preparando para la UEFI de las placas base AM5 para exprimir mejor los Ryzen 9000 que no han tenido precisamente una buena acogida, sino más bien han sido recibidos con total indiferencia. Uno de los cambios ya oficiales en AGESA PI 1.2.0.2 es aumentar la TDP de los Ryzen 5 9600X y Ryzen 7 9700X hasta los 105 W.
La compañía ha indicado que ese modo de 105 W está también cubierto por la garantía de la compañía en caso de que les ocurra algo, que dudo que les ocurra nada. Es un aumento de consumo que se ha visto que no tiene ligado una mejora de rendimiento en algunos casos, como una variedad de juegos, pero en otros sí. Sea como sea, la ganancia máxima es del 10 %, pero no creo que el aumento de consumo compense este modo. Se lo ha sacado de la manga para acallar críticas, por lo que el chíplet de núcleo se ha cribado para una curva de voltaje con objetivo de 65 W de TDP, por lo que aumentarlo a 105 W saca al chíplet de la curva para la cual ha sido cribado. Totalmente subóptimo, pero tampoco no es algo grave.
También se han hecho oficiales los cambios a la latencia interchíplet cuando un núcleo de un chíplet se quiere comunicar con uno del otro chíplet. O sea, es un cambio para los Ryzen 9 9900X y Ryzen 9 9950X, que siguen siendo buenos procesadores pero con algunos problemas en ciertas cargas profesionales. Por último, la compañía ha indicado que las placas base X870 admiten con los Ryzen 9000 al menos DDR5 a 8000 MT/s mediante los perfiles EXPO, considerándola la velocidad de memoria ideal para estos procesadores.