OpenAI anunció en febrero Sora, una inteligencia artificial generativa dedicada a la creación de vídeo, a priori con buenos resultados. Sin embargo, la compañía ha suspendido el acceso anticipado a Sora después de que un grupo de artistas involucrados en su fase de prueba permitieran su acceso a cualquiera. Estos artistas habilitaron una página web que permitía el uso ilimitado de Sora como protesta por prácticas que consideran poco éticas por parte de OpenAI.

Acusan a la compañía de aprovecharse de su trabajo no remunerado en la fase de equipos de ataque (o equipo rojo), diseñada para identificar riesgos en el modelo utilizado. En una carta abierta denunciaron que el proceso parecía más enfocado en la mercadotecnia que en una colaboración real. La filtración permitió a usuarios externos acceder a la API de Sora y generar vídeos mediante inteligencia artificial.

Tras ello, OpenAI cerró el acceso anticipado y se reafirmó en que Sora sigue en fase experimental, destinada exclusivamente a investigación. El incidente refleja las tensiones entre los creadores de inteligencias artificiales y la comunidad artística, que percibe estas tecnologías como una amenaza a su trabajo. Recientemente, más de 11 000 artistas firmaron un manifiesto calificando a las IA generativas como un riesgo importante para el sector creativo.

Vía: EnGadget.