En los últimos años, la dependencia de Estados Unidos de los semiconductores fabricados en Asia ha sido una preocupación creciente, especialmente con las tensiones comerciales que ha creado el país y las interrupciones en la cadena de suministro. La Ley de CHIPS y Ciencia ha buscado atraer inversiones clave para fortalecer la producción nacional de estos componentes esenciales. Ahora, Samsung, Texas Instruments y Amkor Technology abren vía a nuevas inversiones con el respaldo de EUA con importantes subsidios.

Samsung recibirá hasta 4745 M$, menos de lo esperado inicialmente, para apoyar su inversión de 37 000 M$ en la construcción de dos plantas de producción de chips, un centro de investigación y una instalación de encasulado en Tejas. Estos proyectos, previstos para completarse hacia finales de la década, forman parte de un esfuerzo por posicionar a EUA como un líder en la producción de chips avanzados, incluyendo tecnología de 2 nm.

Por su parte, Texas Instruments está destinando más de 18 000 M$ a la construcción de tres nuevas fábricas, dos en Texas y una en Utah, con un respaldo de hasta 1610 M$ por parte del gobierno. Estas instalaciones crearán unos 2000 empleos en manufactura y estarán enfocadas en satisfacer la creciente demanda de semiconductores en sectores como la automoción y las telecomunicaciones.

Amkor Technology, conocida por su experiencia en encapsulado avanzado de chips, planea construir una instalación en Arizona valorada en 2000 M$. El Gobierno estadounidense contribuirá con hasta 407 millones de dólares a este proyecto que se convertirá en el centro de encapsulado más grande de EUA, necesario para los procesadores punteros para IA, pero también para 5G, entre otros.

Vía: Tom's Hardware.