Bethesda estaba por presentar su nuevo proyecto, y aquí ha llegado: un nuevo shooter en primera persona titulado Dishonored, que no puede más que recordar a una mezcla de Bioshock, V de Vendetta y Assassin's Creed, con su ambiente Steampunk.
Tras ser acusado falsamente del asesinato de la querida emperatriz, pasas de ser su guardaespaldas de confianza a convertirte en un temible asesino, conocido únicamente por la perturbadora máscara que has convertido en tu tarjeta de visita. La ciudad vive un periodo de incertidumbre y se encuentra asediada por la peste y por un régimen opresor armado con tecnologías neoindustriales. En este trasfondo, fuerzas oscuras conspiran para ofrecerte poderes que ningún otro ser humano jamás podría imaginar, pero… ¿cuál es el precio? La verdad tras tu traición es tan turbia como las aguas que rodean la ciudad y la vida que otrora conocieras se ha desvanecido para siempre.
Un argumento un poco ya trillado, pero pocas ideas originales quedan ya por explotar en el mundo de los videojuegos. Está siendo desarrollado por Arkane Studios (cuyos componentes han trabajado en juego como Thief o Deus Ex 2).
Se pondrá a la venta antes de final de año en Xbox 360, PS3 y PC.