Uno de los aspectos que más gustan de la franquicia de XCOM es la de gestionar nuestra base de operaciones. Construir nuevas sala, investigar nuevas tecnologías, fabricar nuevo armamento y vehículos. En XCOM 2 le van a dar una vuelta de tuerca porque la base de operaciones será móvil, y llamada Vengador, una nave nodriza alienígena reconvertida.
En esta ocasión tendremos que realizar microgestión de la base puesto que el personal es limitado y podremos irlo asignando a cada sala según sus aptitudes y las necesidades que tengamos en cada momento. La personalización de nuestros soldados también aumenta, y se podrán cambiar más parámetros de su aspecto y de las armas que portarán en combate.
Una base móvil implica que podremos ir moviéndonos para organizar la resistencia a nivel mundial contra la ocupación alienígena. Eso llevará a que tengamos que planear nuestros siguientes movimientos para interrumpir las operaciones alienígenas a la vez que conseguimos suministros y nuevos aliados. El juego se pondrá a la venta el próximo noviembre.