El juego que arrasó el pasado verano, Pokémon Go, ha demostrado que algunos usuarios de teléfonos no están preparados para jugarlos. Puesto que requiere recorrer las calles para cazar pokemones, la mayoría avanzan mirando la pantalla del teléfono —como hacen otros muchos enviando wasaps— y solo unos pocos no tienen cuidado por dónde cruzan o lo que ocurre en su entorno.
Por esos usuarios, el gobierno chino ha decidido prohibir permanentemente el juego en todo el país, a través de la Asociación China de Publicaciones Audiovisuales y Digitales, al considerarlo "una amenaza para la seguridad de la información geográfica, del transporte y de los ciudadanos". China está obsesionada con la censura y el control de la información que se tiene del país y sus ciudadanos, y que esté en manos de empresas japonesas y estadounidenses no resultará del agrado de Pekín.
El juego fue prohibido durante el verano de forma provisional. De esta forma, China y sus 1300 millones de habitantes se queda fuera de las regiones donde conseguir pokemones, aunque en el país la mayoría de servicios de Google no funcionan correctamente, y la cobertura del sistema GPS estadounidense es deficiente y da problemas con la orografía de muchas regiones montañosas del país.
Vía: Ubergizmo.